Seducción
Óleo sobre papel (50×65).
Obra dividida en cuatro partes, dos rojas y dos azules, marcadas con elementos simbólicos. Este es el escenario donde las dos formas galantean.
En la serie Cortejos intuitivos el elemento nuclear de estas obras son dos tipos de líneas, una más ondulada y otra más quebrada, ambas acaban en punta de flecha. Estas líneas “coquetean”, “cortejan”, es decir, interaccionan de diversas formas en un claro simbolismo sexual.
Además, utilizo un vocabulario geométrico reducido a unos pocos elementos circulares y cuadrangulares, con colores muy vivos acompañados de la técnica del “rayado” y el “craquelado”. El objetivo es que el espectador quede desconcertado y genere asociaciones y cogniciones ambiguas, para posteriormente, fruto de la observación más detallada y la reflexión, estructure esas cogniciones entorno a la idea implícita del pintor.